Para prevenir la sarna, se
deberá evitar el contacto con la persona infectada; lavar la ropa, sábanas y
toallas en agua jabonosa caliente y secarlas con mucho calor; si hay una
persona infectada en una casa, se deberán aumentar las medidas de limpieza;
también, se intentará prevenir infecciones secundarias de la piel por el rascado,
para eso se recomienda lavarse las manos a menudo, tener las uñas limpias y
cortadas, y utilizar trapos mojados con agua fría para aliviar el picor. Si la
sarnas es por contacto sexual, se informarán a todas las parejas sexuales
subsiguientes de manera que ellos también puedan recibir el tratamiento.
La sarna suele ser difícil de
autodiagnosticarse, pero hay gente que sí se da cuenta por si sola. Para más
certeza, el proveedor de atención de la salud, examinará un raspado de la piel
en el microscopio. Otras veces, se necesitará realizar una biopsia o tomar una
muestra de piel.
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